Por qué Pantone ha elegido el gris y el amarillo para teñir 2021

Dicen los estadounidenses que si la vida te da limones, haz limonada. Y en esas estamos. Aprendiendo a sacar provecho a las vicisitudes del complejo contexto actual. Debe ser por eso que 2021 se tiñe de amarillo y gris. Así lo ha dictado, como viene haciendo desde hace dos décadas, Pantone, que para esta ocasión ha visto necesario combinar dos tonos en lugar de escoger solamente uno.

El gris 'ultimate gray' y el amarillo 'illuminating' destronan al atemporal e imperecedero 'classic blue' (azul clásico) de 2020 para trasladar un mensaje repleto de energía, fortaleza y esperanza."Necesitamos sentir que todo va a ir mejor, es algo esencial para el alma humana", explican desde la popular empresa. Tanto en ropa, como en decoración y maquillaje primarán estos colores independientes que subrayan el hecho de que elementos diferentes se fusionan para acompañarse mutuamente.

En un contexto en que la gente busca la manera de reforzarse con energía, claridad y esperanza para superar una situación de incertidumbre sostenida, los tonos alentadores y llenos de vida satisfacen nuestra búsqueda de vitalidad. "'Illuminating' es un amarillo brillante y alegre que genera vivacidad y efervescencia: un tono cálido imbuido de la energía del sol", aclaran. Por su parte, el 'ultimate gray' "evoca sensaciones de solidez y fiabilidad que son eternas y que proporcionan unos cimientos firmes. Los colores de los guijarros en la playa y los elementos naturales cuya apariencia erosionada pone de manifiesto la capacidad de soportar el examen del tiempo. Así, inspira una seguridad tranquila y traslada sensaciones de compostura, estabilidad y resiliencia".

La combinación refuerza el espíritu y destaca nuestra necesidad de ser vistos, de tener visibilidad, de ser reconocidos y de que nuestras voces sean escuchadas. Una combinación de colores cuyos vínculos con las ideas, la innovación y la intuición, así como el respeto por la sabiduría, la experiencia y la inteligencia, inspiran una sensación de regeneración y nos proyectan hacia nuevas maneras de pensar y conceptualizar.

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— Sharon Wherry Wed May 06 01:49:41 +0000 2015

Un curioso pronóstico

Durante más de 20 años, el 'Pantone Color of the Year' ha influido en el desarrollo de los productos y en las decisiones de compra de múltiples sectores, como el de la moda, la decoración de interiores y el diseño industrial, así como el embalaje y envasado de productos y el diseño gráfico. El proceso de selección del color conlleva un profundo estudio y análisis de tendencias. Para llegar a la selección final de cada año, analizan a fondo el mercado en busca de nuevas influencias, entre las se incluye la industria del entretenimiento, películas en fase de rodaje, colecciones itinerantes de arte, nuevos artistas, moda, todas las áreas del diseño, destinos turísticos populares, nuevos estilos de vida, tendencias de juego y condiciones socioeconómicas. Asimismo, estas influencias pueden proceder de las nuevas tecnologías, materiales, texturas y efectos que afectan al color, de relevantes plataformas de redes sociales e incluso de eventos deportivos de proyección global.

Mediante el pronóstico de las tendencias de temporada, Pantone Color Institute se asocia con marcas globales que aprovechan de una manera efectiva el poder, la psicología y la emoción del color en su estrategia de diseño.

Una de sus últimas colaboraciones ha sido con Zara, lanzando una colección deportiva personalizable, aunque quizá una de las más destacables es la que tiene con la prestigiosa joyería Tiffany, con la que empezó a trabajar en 2001 para estandarizar su color icónico con el fin de garantizar que fuera reconocible al instante. «El color personalizado que creamos se llamó 'Azul 1837', porque fue el año en el que se fundó Tiffany», cuentan.

Pero, ¿también podemos saber a qué olerá 2021? El 'nariz' español Jordi Fernández, que ocupa un sillón en la Academia del Perfume, considera que los aromas que de una manera inconsciente quedaron impregnados en nuestro recuerdo el año pasado fueron las notas "limpias, protectoras y fuertes del alcohol antiséptico". Notas que evolucionarán, en su opinión, y por nuestra necesidad de protección, "hacia notas más suaves y reconfortantes, efectos cremosos y 'cocooning' -nombre otorgado a la tendencia que explica el placer de quedarse en casa- para después poco a poco dar la bienvenida a notas llenas de color y de alegría".